10 December 2020

Nuevo Instituto Milenio de Física Subatómica en la Frontera de Altas Energías es adjudicado por la Facultad de Física

Fac. Fisica-13

 

 

¿Cuál es el origen de la materia? ¿Cuáles son las leyes que gobiernan el mundo subatómico? ¿Qué aplicaciones tecnológicas se pueden desarrollar a partir de la Física de Altas Energías? Estas son algunas de las preguntas claves que dan origen al recién adjudicado Instituto Milenio de Física Subatómica en la Frontera de Altas Energías, SAPHIR, liderado por Sergey Kuleshov de la Universidad Andrés Bello y por Francisca Garay, académica de la Facultad de Física, como directora alterna. 

 

El nuevo Instituto es albergado por 5 instituciones presentes tanto en Santiago como en el norte del país (UNAB; UC; USM; ULS; UTA) y cuenta con la participación de 10 investigadores asociados, junto a sus equipos. Todos ellos han desarrollado una trayectoria en el área, trabajando en El LHC, un acelerador circular de partículas construido en las instalaciones de la Organización Europea para la Investigación Nuclear, (CERN), en Suiza. De hecho, este es el único equipo de físicos de América Latina que ha sido seleccionado para trabajar en el upgrade 2020 del experimento ATLAS, en el LHC.

 

"El impacto de este Instituto Milenio para el desarrollo de la Física de Altas Energías en Chile es potencialmente enorme, ya que nos permitirá integrar todo el conocimiento y desarrollo acumulado por los científicos locales en colaboración con CERN de una manera unificada. Esto se traduce en el reconocimiento formal de este campo en el país, y es tan solo el primer impulso para que el área llegue a ser tan reconocida como lo es la Astronomía", explica Francisca Garay, directora alterna del Instituto SAPHIR.

  

SAPHIR se integrará como miembro de la sociedad internacional que conforma CERN, lo que permitirá al Instituto colaborar en el desarrollo de ciencia del más alto nivel. 

 

El objetivo de este Instituto de investigación durante los próximos años será avanzar en la comprensión de la Física de las Altas Energías, así como desarrollar tecnologías de punta y transferirlas hacia sectores interdisciplinarios. Algunos ejemplos concretos son la creación de un prototipo de laboratorio bajo tierra (para neutrinos) en la mina Brillador, desarrollado con la Universidad de La Serena, o el uso de detectores de muones para localizar minerales bajo tierra de manera más eficiente.

 

"Desde la UC, nuestro aporte se centrará principalmente en el desarrollo de hardware para el experimento ATLAS, como también, el análisis de datos tomados con este experimento usando técnicas de aprendizaje de máquinas. Otro de nuestros objetivos es potenciar futuros proyectos de CERN como el Compact Linear Collider (CLIC) y el Future Circular Collider (LCC) con estudios sobre la sensibilidad de estos experimentos en Física del bosón de Higgs", concluye la académica del Instituto de Física UC.